sábado, 28 de septiembre de 2013

Conoce y controla...

Desarrollo emocional de los niños 


Por: Aideé Bran


Etimológicamente el término emoción viene del latín emotio-oñis, que significa el impulso que induce la acción. Las emociones pueden ser consideradas como la reacción inmediata del ser vivo en cualquier situación, ya sea favorable o no. En psicología se define como el sentimiento o percepción de los elementos y relaciones de la realidad o imaginación, estas se expresan físicamente mediante reacciones faciales, e incluye reacciones de conducta como agresividad, llanto, etc. A su vez se relacionan con los sentimientos que son la expresión mental de las emociones, incluye la idea de darse cuente de las emociones que se expresan.

En los niños pequeños las emociones se expresan con facilidad; pasan de la rabieta al llanto, y a la risa, a diferencia de los adultos que a partir del aprendizaje social, aprenden a modular la expresión de sus emociones. El desarrollo emocional es un elemento muy importante para su posterior desenvolvimiento en la sociedad a lo largo de todas las etapas de su vida.


¿Qué es la inteligencia emocional?

La inteligencia emocional es la habilidad que nos permite formar conciencia de nuestras emociones, comprender los sentimientos de los demás, tolerar las presiones y frustraciones que se dan en el trabajo, acentúa la capacidad de trabajar en equipo y ser empáticos y sociales. Es decir es la habilidad que posee toda persona para percibir sentimientos, modificar estados de ánimo y brindar mayores posibilidades de desarrollo personal.



Esta se desarrolla en los primeros años de vida, por que las emociones se expresan desde el nacimiento. Su desarrollo dependerá del contexto en el que el niño se desenvuelva.

Según Piaget existen conductas emocionales relacionadas con los procesos de construcción de una mente individual inteligente. Estos se adquieren en un proceso de evolución individual de inteligencia que selecciona estructuras internas relacionadas con la formación y características estructurales del cerebro y los elementos del SN (sistema nervioso) y las relaciona con las percepciones del entorno, dando como resultado procesos mentales que constituyen literalmente una “Epigènesis”(visión del desarrollo según la cual las estructuras y funciones de un organismo surgen como resultado de la interacción compleja entre factores genéticos y no genéticos); la interacción de estos factores son lo que conocemos como inteligencia. De acuerdo con Piaget la habilidad de reaccionar emocionalmente está relacionada con la inteligencia del individuo.

El desarrollo emocional en la primera infancia (0 a 7 años), los bebés nacen con un limitado registro de emociones, que se hacen más complejas a medida que crece y madura; son capaces de mostrar tres expresiones emocionales: sorpresa, placer y malestar. A los dos años las emociones se hacen más complejas, en este momento muchos bebés actúan de forma culpable cuando no se han portado bien y parecen sentir vergüenza, las emociones positivas y negativas, están muy desarrolladas y se vuelven más intensas en el periodo pre operativo de las etapas del desarrollo operativo de Piaget (2 a 7 años).

 La elaboración de las emociones en su mayoría corresponde al desarrollo cognitivo, donde los cambios sociales más notables se dan en este periodo, los niños se dedican el juego solitario, aun que hayan otros niño, cuando el pensamiento es muy egocéntrico y no son capaces de comprender otro tipo de juego, pero al llegar al final de este periodo el pensamiento egocéntrico disminuye y aumenta el juego cooperativo.
 Algo similar ocurre en los arrebatos emocionales entre el comienzo y final de dicha etapa, ya que los niños entre los dos y tres años tienen rabietas, sin que estén dirigidas a nadie en particular, mientras que los niños de cuatro a siete años dirigen su agresividad a otros. Este tipo de comportamiento se trata de una forma de emoción compartida, más social y menos egocéntrica.

En la etapa de operaciones concretas el niño tiene la capacidad de razonar más como un adulto, menos en los conceptos abstractos; en las operaciones formales, al final de la niñez la mayoría de las personas llegan a un tipo de cognición adulta plena. Asiendo referencia al aspecto afectivo emocional se influyen actitudes, sentimientos, valores y motivaciones.

Existen influencias ambientales donde Piaget y Erickson coinciden con la convicción de que debe concederse al individuo la capacidad potencial de salvar los obstáculos que el he puesto o que el medio le opone. Erickson incluye todos los factores ambientales aun los que no ejercen influencia directa sobre el niño, pues todos son importantes para el desarrollo emocional.

Respecto a los medios por los cuales el individuo supera los obstáculos de su ambiente, el potencial de adaptación del ser humano arraiga en la estructura emocional de cada individuo, admite que el potencial intelectual significa una contribución, y no determina el curso del ser humano, como lo dice Piaget.

El desarrollo social emocional y el desarrollo intelectual no se puede separar: toda persona es una como entidad biológica psicológica y residen en ella y tienen lugar en un sustrato biológico, los ámbitos intelectual, social y afectivo, como un conjunto interactuante.

Dentro del desarrollo social y afectivo el desarrollo emocional influye directamente en la evolución intelectual del niño; por ejemplo, si se tiene un desarrollo emocional poco satisfactorio el niño puede tener limitaciones en la memoria, dificultades de la percepción y la atención; disminución de las asociaciones mentales satisfactorias, mientras que un desarrollo correcto de las capacidades produce un aumento de la motivación, curiosidad y de las ganas de aprender, amplitud de la agudeza y profundidad de la percepción.


El desarrollo emocional satisfactorio supone ser consientes de los propios sentimientos, estar en contacto con ellos, poseer la capacidad de empatizar, simpatizar y generar vínculos afectivos. La conciencia de los propios sentimientos y su expresión mediante el habla ayuda a producir una individualidad, aceptación de sí mismo, seguridad y una autoestima adecuada.

Los niños deben de expresar y experimentar sus sentimientos completa y concientemente; de lo contrario se expone a ser vulnerables a la presión de sus padres o adultos, aceptando influencias negativas.
El desarrollo emocional tiene relación con los ámbitos familiar, escolar, social debido a la complejidad emocional de cada persona ya que se entrelazan para operar de forma cognitiva, afectiva y conductual.

Dicho desarrollo es importante debido a que se esta conciente de lo que se siente, por lo que se puede deducir que se está en contacto con los sentimientos y se es capaz de involucrarse adecuadamente con otras personas.
El desarrollo emocional va madurando conforme a nuestras experiencias, esto forma una parte importante de nuestra vida ya que ayuda a entablar buenas relaciones, pero si el desarrollo emocional no es adecuado, se puede llegar a ser vulnerable ante la sociedad o buscar un bien propio y satisfacción.


L a Tristeza como Necesidad

 
  L a Tristeza como Necesidad


Por: Ana Lilia Delgado García  
       
El término tristeza es utilizado para designar a una de las sensaciones o emociones más típicas y básicas del ser humano.
La tristeza se caracteriza por generar sentimientos de desazón, angustia, preocupación y pérdida de energía o de voluntad.
La tristeza se expresa normalmente a través de gestos faciales en los que la cara toma una expresión más caída, falta de energía. El llanto es, también, uno de los elementos más característicos de la tristeza ya que surge como una reacción casi instantánea ante una situación de pérdida, dolor o insatisfacción. Otros modos en los que una persona demuestra su tristeza son el desgano, es decir, la falta de iniciativa para enfrentar aquella realidad que lo vuelve triste, la falta de apetito, la preocupación, la angustia, el stress, etc.
Depende de la actitud. Cuando te entristeces piensas que te ha sucedido algo malo. El que algo malo te ha ocurrido es sólo una interpretación y entonces tratas de escapar. Nunca meditas sobre ello. Luego quieres ir a ver a alguien; a una fiesta, al club, o enciendes la televisión o la radio, o


empiezas a leer el periódico; haces algo para poder olvidar. Esta— que la tristeza es algo malo—es una actitud errónea que te ha sido transmitida: No hay nada malo en ella es aquí cuando se convierte la tristeza en una gran necesidad del ser humano.
Es  cuando nos damos cuenta que necesitamos sacar todo lo que guardamos o reprimimos “estar triste” también es una necesidad, esta es una forma en la que el corazón avisa de que hay que hacer cambios interiores.
La tristeza; se trata de atravesar estas experiencias, para eso, hace falta vivenciar el dolor, pero sin recrearse en darle vueltas y vueltas. Darse un tiempo, pero sin huir del experiencia ni sepultarla como si no pasara nada. Llorar el dolor y compartirlo.

Dichoso quien siente la tristeza porque eso demuestra que esta en contacto con sus emociones, la tristeza toca la puerta alas lagrimas y al desbordarse ellas es como si dejáramos salir algo que nos oprime el corazón, el efecto de llorar descarga y de allí la reflexión, cuando la serenidad podemos evaluar.
No me gusta que se vea con lastima ala persona triste mientras esa tristeza sea una emoción que al sentirla la dejamos pasar



Conclusión:
La tristeza como tal es un sentimiento, es la emoción cuando hemos perdido algo importante, cuando nos ha decepcionado algo o cuando ha ocurrido alguna desgracia, que nos afecta a nosotros u otras personas.
Pero en ocasiones la evadimos, creemos que es algo malo. Pero no; porque la Tristeza también es una necesidad del ser humano y que es necesario vivenciar el dolor, darle tiempo, llorar y compartirlo.
No todos reaccionan igual cuando se sienten tristes, todos pasan por una sensación desagradable que no quieren volver a experimentar.
Debemos tomar la tristeza como una necesidad; pues la misma puede tornarse en un vicio. Esto en un principio puede sonarnos como un pensamiento poco racional, sin embargo si los analizamos mas detenidamente podremos entender que la tristeza al igual que la alegría es un estado afectivo por lo tanto de carácter subjetivo manifestado muchas veces atreves de emociones necesarias para el ser humano.